ILUMÍNAME SEÑOR REFLEXIONES DE VIDA
Es maravilloso Señor, tener mis brazos perfectos,
cuando hay tantos mutilados,
mis ojos perfectos, cuando tantos no tienen luz,
mis voz canta, cuando otras mendigan.
Es maravilloso Señor, volver a casa,
cuando tantos no tienen donde ir.
Es bueno sonreír, amar, soñar, vivir,
cuando hay tantos que odian, lloran y mueren sin
haber vivido la vida…
Es maravilloso Señor, tener un Dios para creer,
cuando tantos no poseen una creencia.
Es maravilloso, sobre todo:
tener tan poco que pedir y tanto para agradecer.
Aquí te damos un ejemplo de una oración musulmana:
Dios mío, dame luz en mi corazón y luz en mi lengua y luz en mi oído y luz en mi vista y luz en mi tacto y luz en todo mi cuerpo y luz delante de mí y luz detrás de mí.
Señor, te ruego que me des luz en mi mano derecha y luz en mi mano izquierda y luz encima de mi y luz debajo de mí. Intensifica la luz en mi interior, ilumíname con luz.